Según mis estadísticas de la ciencia ficción española, 51 de las 746 novelas de La conquista del espacio, 27 de las 244 de Héroes del espacio y 2 de las 31 de La conquista del espacio extra, junto con 11 de las 63 reediciones que formaron la segunda etapa de La conquista del espacio editada por Ediciones B, estaban firmadas por Joseph Berna, a las que hay que sumar otras tres que quedaron inéditas tras el colapso de Bruguera, de las cuales hablaré más adelante.
Esto hace un total de 91 novelas publicadas incluyendo las 11 reediciones más las tres inéditas, lo que convierte a Joseph Berna en uno de los más prolíficos autores de bolsilibros de ciencia ficción; esto sin contar, claro está, con las que escribió de otros géneros ya que, tal como solía ocurrir con muchos colegas suyos, durante los años que estuvo activo fue un auténtico todoterreno: según su propio cómputo estas alcanzan un total de 382 publicadas, junto con otras 13 inéditas.
Hecha esta necesaria introducción, surge de inmediato la pregunta: ¿Quién era Joseph Berna? Desde hacía tiempo yo sabía que tras ese seudónimo anglosajonizado se escondía un señor llamado José Luis Bernabeu López… y, absolutamente, nada más, ya que es sobradamente conocida la dificultad con la que todavía a estas alturas nos encontramos a la hora de «ponerles cara», como digo yo, a estos obreros de la literatura que tan explotados fueron por las editoriales y tan maltratados siguen siendo hoy por quienes tanto presumen de ser los celosos guardianes del canon y los defensores de las esencias del género. Ellos se lo pierden, puesto que por encima de discusiones bizantinas sobre la calidad literaria de los bolsilibros —en los que hay de todo, recordemos la lúcida ley de Sturgeon—, lo que resulta indiscutible, les guste o no, es que la literatura popular en su conjunto, y no solo los bolsilibros, supuso uno de los fenómenos culturales, y sobre todo sociológicos, más interesantes de la España de la segunda mitad del siglo XX, que no es poco.
Pero vayamos al grano. Hasta hace muy poco, tal como acabo de explicar, lo único que conocía de Joseph Berna era su verdadero nombre, y también he de confesar que tampoco podía opinar mucho de sus novelas ya que su llegada fue relativamente tardía, en noviembre de 1976 con ¿Me das fuego, marciano?, número 326 de La conquista del espacio. Por aquel entonces yo estaba en la universidad y atravesaba por un período iconoclasta en el que me desentendí de los bolsilibros que con tanta fruición había devorado tan solo algunos años atrás, ahora encandilado por la ciencia ficción seria que acababa de descubrir. Como he comentado en otros artículos, pasado un tiempo acabé reconciliándome con los bolsilibros, ya no tanto como lector —aunque los he seguido leyendo— sino como coleccionista primero, y como investigador después. Y como en esta segunda etapa centré mi atención principalmente en las colecciones más antiguas, la consecuencia fue que mi conocimiento de sus novelas siguió siendo muy limitado.
Por fortuna, la situación cambió gracias a la Asociación de Amigos del Bolsilibro, empeñados —y lo están consiguiendo— en reivindicar este modesto formato gracias a unas cuidadas ediciones en las que intercalan las reediciones de los bolsilibros publicados en su día con la recuperación de textos inéditos. Esta asociación editó en 2017 El maravilloso mundo de Joseph Berna, una recopilación de seis de sus bolsilibros de diferentes géneros, dos de ellos inéditos; uno de los cuales era de ciencia ficción, aunque esta iniciativa es tan solo el inicio del ambicioso proyecto de reeditar la totalidad de su obra, un raro privilegio no alcanzado todavía por ningún otro autor de literatura popular. Comentándolo con los editores y mostrándoles mi interés por conocer a José Luis Bernabeu, estos se ofrecieron a ponerme en contacto con él, lo cual hice comprobando que era cierto lo que me habían dicho acerca de su cordialidad y su amabilidad… y bien, gracias a un cruce de correos electrónicos ha sido posible este artículo.
Así pues, empecemos. José Luis Bernabeu López nació en la localidad valenciana de Játiva, el seno de una familia trabajadora, el 16 de mayo de 1946. Allí curso estudios primarios y el bachillerato, y con 14 años se trasladó con su familia primero a Elche y dos años después, en 1962, a Valencia, ciudad en la que reside desde entonces, entrando a trabajar en Renfe como administrativo, empleo que mantuvo durante un tiempo. Está casado y es padre de un hijo.
Lector compulsivo desde su infancia, con casi 25 años se planteó el reto de escribir un bolsilibro emulando a los autores que tanto le gustaban: acababa de nacer Joseph Berna. Su primera obra fue una novela de género policíaco, La misteriosa Stella, a la que siguieron otra también policíaca —El club Vampiro— y otras dos del oeste: Mexicanas a granel y Un escocés en Texas. Según me comentaba, aun ciñéndose a los cánones de ambos géneros ensayó un toque personal que acabaría convirtiéndose en la marca de la casa: el humor desenfadado, algo que contrastaba con la seriedad que infundían muchos colegas suyos a sus obras.
Bien, las novelas ya estaban escritas, pero ahora quedaba lo más arduo, intentar publicarlas. Corría el otoño de 1972, y las posibles alternativas eran muy limitadas. Valenciana, la que hubiera sido la opción más inmediata para él algunos años antes, ya no publicaba bolsilibros, y ese mismo año Toray acababa de liquidar sus colecciones. Rollán duró algo más, pero estaba ya de capa caída. Quedaba Bruguera, entonces en pleno auge editorial, y a ella envió José Luis sus originales… que, para su sorpresa —jura que no se lo podía creer—, no solo le fueron aceptados, sino que además le pidieron que les enviara uno nuevo cada mes.
Pese a que para entonces La conquista del espacio llevaba ya alrededor de año y medio en los kioscos, hubieron de pasar cuatro años hasta que José Luis se decidió a abordar la ciencia ficción, y no fue por iniciativa propia sino a petición de la editorial, cabe suponer que en un intento de diversificar su plantel de escritores. Al preguntarle por sus preferencias sobre unos géneros u otros, su respuesta fue que no las tenía siempre que pudiera mantener su línea humorística, cosa que hizo.
Su larga relación con Bruguera, que se mantuvo hasta el cierre de la editorial en 1985, fue por lo general bastante similar a la de otros autores. Los pagos eran por novelas publicadas, y la editorial retenía los derechos de publicación durante diez años. Su compromiso inicial consistía en enviar un original al mes, pero la cantidad fue subiendo sucesivamente hasta cuatro e incluso, en los últimos años, a seis, ritmo que no pudo mantener volviendo a las cuatro… lo que no está nada mal, pues suponía escribir una novela a la semana. Obviamente, llegó un momento en el que tuvo que dedicarse exclusivamente a la escritura. En cuanto a sus fuentes de inspiración, afirma que nunca ideaba una historia antes de ponerse a escribirla, sino que era esta la que tomaba vida propia llevándole por donde quería.
Bruguera clasificaba las novelas publicadas en tres categorías premiando a las que consideraba mejores, y José Luis presume con orgullo de haber conseguido dos primeros premios y siete segundos, lo que para él era un acicate. Dado que Bruguera le llegó a publicar cerca de 400 bolsilibros, cabe suponer que sus novelas tenían buena acogida entre los lectores.
Pero en 1985 Bruguera colapsó tras una larga agonía, dejando a sus autores literalmente tirados. José Luis no fue una excepción, ya que se quedó sin cobrar cerca de dos millones de pesetas, entonces una cantidad bastante respetable, y con once originales ya aceptados que no llegaron a ser publicados: cinco del oeste, tres policíacos y otros tres de ciencia ficción, de los cuales hablaré más adelante. Otra consecuencia negativa fue que su carrera como escritor quedó drásticamente truncada, ya que en aquellos años desaparecieron también la práctica totalidad de las colecciones de bolsilibros de otras editoriales, perdiéndose este mercado tanto para los autores como para los lectores.
Hubo, no obstante, una excepción a la que se podría calificar de parcial. Tras adquirir el Grupo Z el fondo editorial de Bruguera, comenzó a reeditarlo parcialmente a través de su filial Ediciones B. Esto supuso la resurrección de las antiguas colecciones de bolsilibros en las que José Luis había colaborado y, si bien no tuvo la posibilidad de publicar títulos originales, salvo los del oeste, al menos tuvo la satisfacción de ver reeditadas casi 200 —es decir, algo más de la mitad— de sus novelas, principalmente del oeste y también policíacas, de terror y de ciencia ficción.
En lo que respecta a este último género las novelas reeditadas fueron 11 tal como dije anteriormente, alrededor del 15% del total. La nueva etapa de La conquista del espacio publicó un total de 63 títulos, reediciones en su totalidad, lo que quiere decir que casi una quinta parte de todos ellos llevaron la firma de Joseph Berna. José Luis se deshace en elogios con Ediciones B donde, según sus propias palabras, «se portaron fenomenal conmigo, sólo tengo palabras de agradecimiento para ellos».
Lamentablemente estas colecciones fueron el canto del cisne de la literatura popular española en general y de los bolsilibros de ciencia ficción en particular. La conquista del espacio desapareció en 1995, y un año más tarde, una reestructuración de la política editorial de Ediciones B liquidaba por completo, a excepción de casos muy puntuales, toda su línea de literatura popular. Al igual que ocurrió con la práctica totalidad de sus colegas Joseph Berna dejó de existir, aunque su alter ego José Luis Bernabeu no cesó por completo de escribir fuera ya del mundo de los bolsilibros.
Pero como dice el refrán siempre que llueve escampa y, tal como he comentado, en El maravilloso mundo de Joseph Berna apareció publicada una de sus tres novelas inéditas de ciencia ficción. Se titula Shukiray debería haber sido el número 250 de la colección Héroes del Espacio, interrumpida en el 244, lo que quiere decir que quedaron sin publicar al menos otros cinco originales de diferentes autores. Aquí, con el permiso de José Luis, les voy a relatar una anécdota curiosa. El título original del bolsilibro no era este, sino Shakira. Conviene recordar que cuando la escribió, allá por 1985, la popular cantante homónima era una tierna niña de 8 años que, como cabe suponer, todavía no había iniciado su carrera artística. Pero como en los 32 años transcurridos desde entonces las circunstancias habían variado ostensiblemente, José Luis optó por cambiar el título, que es también el nombre de la protagonista de su novela.
Además de Shukira José Luis conservaba otros dos originales inéditos de ciencia ficción: El diamante de Gurko-To, al que le había sido asignado el número 747 de La conquista del Espacio, que alcanzó solo hasta el 746, y El brujo de la galaxia, cuya publicación había sido aprobada aunque no llegaron a serle asignados ni colección ni número. Un año después de la publicación de Shukira le llegó el turno a El brujo de la galaxia, publicada por Matraca Ediciones —surgida del entorno de la Asociación de Amigos del Bolsilibro— con el número 3 de la colección Serie Beee, común para los diferentes géneros y que cuenta con la particularidad de haber rescatado el formato tradicional de los bolsilibros. Así pues, en el momento de escribir estas líneas —mayo de 2018— tan solo queda inédita, esperemos que sea por poco tiempo, El diamante de Gurko-To.
RELACIÓN COMPLETA DE BOLSILIBROS DE JOSEPH BERNA
Título | Nº | Colección | Editorial | Seudónimo |
Astor el Cruel | 522 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Base marciana «Juno» | 473 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Cautivos de la reina Thala | 632 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
¿Dónde estará la Tierra? | 99 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Dunas vivientes | 735 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Dunas vivientes | 45 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
El ataque de las mujeres pájaro | 729 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El ataque de las mujeres pájaro | 4 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
El brujo de la galaxia | Bruguera | Joseph Berna | ||
El burlador de la galaxia | 585 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El burlador de la galaxia | 26 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
El cerebro asesino | 651 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El coleccionista de seres | 37 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El coloso del espacio | 425 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El coloso del espacio | 62 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
El diamante de Gurko-To | 747 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El dios de los volcanes | 634 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El enviado de Bongo | 694 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El hijo de las estrellas | 118 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El imperio de los robots | 654 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El loco de la galaxia | 615 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El loco de la galaxia | 2 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
El mayor caradura de la galaxia | 391 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El mayor diamante del universo | 506 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El otro planeta Tierra | 739 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta de las sirenas | 7 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El planeta de los centauros | 592 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta de los cíclopes | 5 | La conquista del espacio extra | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta de los hombres alados | 491 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta de los hombres-toro | 697 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta dormido | 533 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta encantado | 542 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta fantasma | 459 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El planeta robotizado | 208 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El platillo rojo | 201 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El reino de los seres de hielo | 31 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El reino de Zora | 703 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El rey de los cerebros | 212 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
El ser que llegó de Kumbo | 743 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El templo del dios Gumma | 679 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El tirano de Doklo | 668 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
El tirano de Doklo | 22 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
En busca de la princesa Tara | 237 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
En poder de los hombres araña | 665 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Energía cósmica | 15 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Esclavos para Kobrac | 513 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Guerra de cerebros | 174 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Imperio flotante | 417 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Imperio flotante | 58 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
La astronave fantasma | 194 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
La diosa de las profundidades | 640 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La diosa terrestre de Glaxo | 478 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La diosa terrestre de Glaxo | 43 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
La era de los robots | 440 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La esfera maldita | 548 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La fortaleza flotante | 661 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La invasión de las burbujas | 621 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La invasión de las burbujas | 17 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
La invasión de los cerebros | 21 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
La invasión de los mutantes | 404 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La llamada de Therko | 111 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
La máquina de los años | 148 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
La misteriosa Andrómeda | 4 | La conquista del espacio extra | Bruguera | Joseph Berna |
La necrópolis del espacio | 510 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La pirámide de oro | 646 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La reina del sistema Uta | 358 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La roca asesina | 497 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
La Tierra va a estallar | 155 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Las amazonas de Sirox | 398 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Las amazonas de Sirox | 60 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
Las brujas de Atox | 501 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Las bucaneras del espacio | 168 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Lluvia diabólica | 463 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Lluvia diabólica | 41 | La conquista del espacio | Ediciones B | Joseph Berna |
Lluvia roja | 136 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Los emisarios de Macombo | 220 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Los enemigos del Sol | 454 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Los vigilantes del cosmos | 437 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
¿Me das fuego, marciano? | 326 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Me enamoré de un robot | 556 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Misterio en la estación WZ-2000 | 218 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Objetivo: destruir el Sol | 671 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Objetivo: Plutón | 527 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Planeta hambriento | 41 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Planetas gemelos | 138 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Prisión espacial | 34 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Shukira | 250 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Sirpa, la espía de Zombo | 228 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Telaraña espacial | 58 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Terror en la «Alpha-3000» | 230 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Trampa galáctica | 691 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Viaje a lo desconocido | 636 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Y la Tierra quedó paralizada | 224 | Héroes del espacio | Ceres / Bruguera | Joseph Berna |
Zarco «el Grande» | 442 | La conquista del espacio | Bruguera | Joseph Berna |
Los títulos en color rojo son reediciones
Novela inédita
Novelas inéditas publicadas en 2017 (Shukira, en una antología) y en 2018 (El brujo de la galaxia).
© Copyright de José Carlos Canalda para NGC 3660, Octubre 2018