Entrevista realizada por José Jorquera
Javier Arnau (Puerto de Sagunto, Valencia) es un autor con una extensa carrera. Ha publicado novelas, antologías, reseñas, artículos, poesía y relatos en diferentes revistas, portales, webs, blogs, etc. Es editor de la revista digital Planetas Prohibidos, colaborador de Anika Entre Libros. Ha sido ganador del Premio Ignotus 2011 por el poemario de ciencia ficción co-escrito con Carlos Sueiro Paraísos Cibernéticos. Ha coordinado la antología Herederos de Cthulhu, en la que también participa como autor. Podéis encontrar más información en su página personal.
¿Cuándo y de qué forma se despertó el gusanillo de la escritura?
Creo que está despierto desde casi siempre. De una manera u otra, desde que tengo uso de razón, he estado escribiendo algo, lo que sea, a un nivel u otro. De hecho, me parece que esta pasión debe de ir a la par que mi fascinación por la lectura, que, por cierto, me viene también desde pequeño: todo eso, y supongo que querer expresar mis ideas y emular a mis autores favoritos, es lo que hizo que empezase a escribir las típicas poesías juveniles, pequeños relatos, historias que me inventaba para entretener a los compañeros… Y, por último, supongo que también ha tenido bastante que ver el hecho de que mi padre, lector empedernido, me contase historias que inventaba desde que yo era muy pequeño. Como ves, se trata de un conglomerado de circunstancias, gustos, y tal vez incluso casualidades las que terminaron convirtiéndolo en necesidad.
Cuando escribes, ¿qué pretendes trasladar? ¿Qué hay detrás de cada relato? ¿Qué te impulsa a escribir?
Siempre procuro sacar lo que llevo dentro; compartir mis pensamientos, mis experiencias, y mi bagaje como lector/autor. ¿Qué hay detrás de cada relato? Pues eso; mis ideas, mi manera de ver la vida y mi visión general acerca de lo que nos rodea; todo ello trasladado siempre a un marco fantástico, por supuesto. En cuanto a qué me impulsa, veamos, imagino que «exorcizar mis fantasmas», es decir, dar salida a lo que tengo en la cabeza.
¿Piensas que una buena historia siempre ha de transmitir algo?
Sí, siempre. Si no se quedaría coja.
Me llama poderosamente la atención tu faceta de escritor de poesía. ¿Con qué estilo narrativo te sientes más cómodo escribiendo? ¿Dónde notas que tus ideas se plasman en el papel de manera más fluida?
Donde me siento más cómodo es, sin lugar a dudas, en el relato corto, otra de mis pasiones; tal vez la más conocida sea la poesía, pero de ambos, quizá me sienta mejor moviéndome en el mundo del relato. En él es donde, a mi modo de ver, se plasman mejor las ideas; de una forma mucho más fluida. Ten en cuenta que la mayoría de mis escritos parten de una base de improvisación, a veces total, y a veces a partir de una simple frase, titular, o vías similares, por lo que fluyen de una manera mucho más orgánica y son más fáciles de articular dentro de un relato. Sí, definitivamente me siento más cómodo con él.
¿La poesía requiere de más creatividad que la novela?
Se trata de dos medios diferentes, muy diferentes; dos procesos distintos y dos estilos también muy dispares de contar según qué cosas. En el caso de la novela, cada autor puede enfocarlo como quiera, por ejemplo, están los autores de brújula, o los autores de mapa… En el caso de la poesía, se podría decir que es como escribir un relato corto o un cuento (por intentar explicarlo de una manera muy sucinta), en un espacio muy reducido. En él, tienes que contar lo suficiente como para atrapar al lector. Además, en este caso tenemos el añadido de que hay que moldearlo al estilo de la poesía. Resumiendo, la poesía combina la dificultad de ese espacio más reducido para contar una historia, con la de ese estilo tan particular de la poesía. Otra diferencia entre ambos estilos literarios, es que en el caso de la novela te puedes permitir muchos más lujos; describir ampliamente cada personaje, construir una trama compleja, o extenderte en el desarrollo de las relaciones que tienen lugar entre los susodichos personajes; sin embargo, en el caso de la poesía ha de ser todo mucho más conciso y directo.
Como decía, se trata de dos procesos muy distintos…
¿Qué supuso para ti personal y profesionalmente el haber ganado el premio Ignotus en 2011?
Mira, te contaré algo, aunque ya lo haya comentado. Hace cierto tiempo, antes de tener Internet y de que la tecnología permitiera el nacimiento de pequeñas editoriales, y/o pequeñas tiradas, leía lo que buenamente se podía conseguir del fantástico de manera más o menos fácil; básicamente Asimov, Clarke, Heinlein, Tolkien, Lovecraft… y principalmente las colecciones de Orbis, Nueva Dimension, etc. Al entrar en juego Internet, descubrí que en España todavía había un fándom, y que se hacían unas convenciones llamadas Hispacones… Lo siguiente fue empezar a colaborar en revistas digitales (Pulsar, por ejemplo, pero ha habido muchas más), además de terminar formando parte de Cyberdark.net. En aquel momento, pensaba que formar parte de todo aquello era fantástico, así que, si encima terminaba publicando algo, o ganaba algún premio, sería fenomenal… y precisamente poco después gané el Ignotus, y conseguí varias nominaciones más, tanto por lo que había escrito como por la revista. Y una vez dicho esto, imagínate lo que ha supuesto…
Aprovechando tu faceta de editor, voy a continuar con unas preguntas sobre el tema. ¿De dónde surgió la idea de la revista Planetas Prohibidos? ¿Qué te ha aportado esta experiencia?
Pues fue a raíz de una mala experiencia… de un proyecto previo que tuvo malos rollos y cosas que no merece la pena recordar. De ahí surgió un grupo de gente que creó el blog Planetas Prohibidos para escribir sobre ciencia ficción (básicamente) con artículos, noticias, y diversas secciones. Cuando finalmente salí del proyecto anterior, contacté con ellos para ofrecer todo lo que tenía preparado, y barajar la posibilidad de crear una nueva revista con el material y los contactos previos. Porque, por diversas causas, tenía (tengo) una serie de amistades y contactos de las que me enorgullezco y me alegro de tener, que no dudan en echar una mano cuando se les necesita. Te hablo, por decir unos nombres (y porque fueron de los primeros que me ayudaron), de David Mateo, Juan de Dios Garduño, J.E. Álamo, Roberto Malo, Jesús Cañadas, Pablo Uría, Pedro Belushi, y un largo etcétera.
Has sido uno de los artífices de la antología Herederos de Cthulhu, ¿me puedes contar algo sobre el proyecto? ¿Tuviste que seleccionar entre varias obras o tenías fijado en su conjunto lo que querías incluir? ¿Consideras que esta antología está a la altura de lo obra de H. P. Lovecraft?
Te cuento, claro. Estaba hablando con uno de los socios de la editorial Kokapeli, el también escritor León Arsenal, de otros temas muy diferentes, cuando se me ocurrió preguntarle, puesto que yo tenía un relato de temática lovecraftiana, si no tenían previsto publicar una antología de esa temática. León me dijo que lo consultaría con el resto de sus socios pero que, por su parte, sí podría llegar a considerarlo. Así que en el momento en el que lo tuvieron claro, me comentó que como había sido idea mía, podría ser el coordinador y, ni corto ni perezoso, me lancé, poniéndome a ello ipso facto.
Antes de abrir convocatoria, quise contar con un colchón de relatos para empezar, así que contacté con ciertos autores, tanto aquellos que ya tenían alguna obra sobre el tema, como esos otros que sabía que podían escribir sobre ello, lo hubieran tratado o no previamente. Y con esos relatos, una vez leídos, evaluados, comentados, etc., resulta que ya teníamos los precisos (incluso tal vez más) para conformar una antología. Porque, además, quiero aclarar que quise recuperar algunos textos más antiguos, o publicados de forma más o menos minoritaria, para darles un nuevo recorrido.
¿Está a la altura de la obra de Lovecraft…? pues han surgido algunas reseñas, una de ellas publicada aquí mismo por Noviembre Nocturno, que dice que sí… y si ellos lo dicen, algo habrá.
De paso, quiero aprovechar para comentar que entrando en la web de Kokapeli, en la sección de Autores de Herederos de Cthulhu, se puede acceder a abundante material extra que, en principio, debía haber sido accesible mediante códigos QR desde el libro, pero que finalmente no se pudo hacer.
Una curiosidad. ¿En qué te basas para seleccionar una obra para su publicación? ¿Qué consideras más importante? ¿La calidad de la obra, de la historia, lo innovadora que es, si posee, o no, viabilidad económica, o más bien es un conjunto de todas ellas?
Podríamos decir que un conjunto de todo… menos la parte económica, claro, dado que la revista es gratuita y Herederos de Chthulhu ha destinado precisamente la parte de los autores a Anika Entre Libros. Y, como decía antes, ese conjunto que tiene que tenerlo todo, por supuesto ha de llevar implícito que la historia me cuente algo. Que me haga pensar… Luego ya se verá si es demasiado arriesgada o convencional, pero mientras esté contando algo, será digna de ser tenida en cuenta. A partir de ahí, ya valoraremos si sí o si no.
¿Podrías recomendarnos alguna novela que hayas leído últimamente que te haya enganchado, fascinado, o que pienses que deberíamos leer dentro de los tres géneros de la web terror, fantasía y CF, haciendo especial hincapié en autores nacionales?
De acuerdo, haciendo ese especial hincapié en autores nacionales, recomendaría sin dudarlo El Linaje de la Luna Negra, de David Mateo (es interesante leer también una novela suya anterior, Noches de Sal, dado que están relacionadas entre sí, aunque en el caso de “El linaje…”, puede leerse independientemente sin saber nada de la anterior, aunque sí aumenta el interés si se leen ambas). Terror y misterio. Y en cuanto a antologías, por meternos en otro formato y en otro género, me ha sorprendido La canción de Orfeo, de Cápside, en colaboración con Cificom (II Antología Cápside CifiCom).
¿Hay más proyectos que bullan en tu cabeza? ¿Puedes adelantarnos algo en lo que estés trabajando para sorprendernos?
Pues mira, me gustaría escribir la continuación de la novela corta que hemos publicado Beatriz T .Sánchez y yo con James Crawford Publishing (JCP); La Sombra sobre Mechanisburgo, mezcla de Blade Runner con Cthulhu (disponible en Amazon).
Seguir colaborando en las antologías de JCP (en breve tiene que salir una antología de ciencia ficción ochentera, en la que tenemos autores como Ángel Torres Quesada, Rafa Marín, León Arsenal, Juan Miguel Aguilera, Rodolfo Martínez, Carlos M. Federici,… y otros más actuales a los que hemos embarcado en el proyecto, es el caso de una tal Pily Barba, Anika Lillo, Ramón San Miguel, Vicente Hernándiz, Alfredo Álamo, Dioni Arroyo, Laura López Alfranca, yo mismo, y con portada de Ángel García Alcaraz).
Terminar en algún momento un par de novelas compartidas que tengo a medias (una con mi hermano Carlos, de fantasía, y otra con Aída Albiar y Luis Martínez, de fantasía urbana).
Otra colaboración en un cómic de cifi…
Cosillas…
¿Qué tal tu relación con el fándom? Ya que estás en primera línea, tanto con tu blog, como por la parte de edición, ¿recibes comentarios, críticas, etc.? ¿Qué te ha aportado esta experiencia?
Mi relación con el fándom es perfecta. Como ya he comentado, antes de comenzar en todo este mundillo ya tenía una serie de amigos que no vacilaron a la hora de echarme una mano. Además, al poco de llegar, conocí a mucha más gente; toda ella dispuesta a colaborar como fuera. Personalmente, no he recibido más que ayudas y colaboraciones, pero es que, en el caso contrario, sucede lo mismo; cuando me lo piden, o se necesita alguna colaboración, me gusta ayudar en lo que pueda.
Y sí, recibo comentarios, y la mayoría positivos. Respecto a la revista, también ha sido muy bien acogida. Ahora hay más publicaciones, pero surgió en un momento en el que prácticamente no había, y todo se concentraba en un par de ellas, así que el recibimiento fue muy bueno y la línea que ha seguido hace que se siga valorando. En cuanto a mis escritos, ya sean en antologías o propios, también son normalmente bien acogidos; muchos han sido peticiones directas de los mismos editores, o convocatorias en las que han pasado una selección. Respecto al público en general, pues cada uno tiene sus gustos, claro, pero normalmente las críticas han sido mayoritariamente positivas.
Y ¿qué me ha aportado?, pues lo más preciado, un grupo de amigos, tanto personales como «virtuales», con los que me alegra y enorgullece poder colaborar, en uno u otro sentido. También, relacionarme (e incluso colaborar) con autores que me fascinaban desde hace años, y a los que soñaba poder conocer: Rafa Marín, Juanmi Aguilera, Rodolfo Martínez, Ángel Torres Quesada, Javier Redal, etc., así como otros de «hornadas más recientes» pero a los que igualmente admiro, ya sean escritores, editores, ilustradores…, como puedan ser David Mateo, Juan de Dios Garduño, Joe Álamo, Pablo Uría, Víctor Conde… y, por supuesto, formar parte de todo esto.
Y para terminar, ¿de dóndes sacas el tiempo para tantos proyectos? ¿Te afecta en tu vida personal y familiar?
De dónde saco tiempo… últimamente está más difícil, pero, como digo ya de manera habitual, con no dormir hay tiempo para todo. Y no, no me afecta en mi vida personal.
Agradecerte desde NGC 3660 el tomarte el tiempo suficiente para contestarnos, ya que sabemos que tienes una vida bastante ajetreada. Un verdadero placer. Las últimas palabras son tuyas. Gracias.
Pues gracias a vosotros, por supuesto. Y, efectivamente, tengo una vida bastante ajetreada. Mi trabajo me obliga a estar una semana sí y otra no, de viaje. Las semanas que no viajo, además, tengo horarios de lo más… raros, pero de ahí es de donde voy sacando precisamente mi tiempo para esta afición.
Un abrazo a todos los lectores.