Octavi Franch responde

 

 

Entrevista realizada por José Jorquera Blanco

Octavi Franch responde

Octavi Franch (Barcelona, 1970) es un escritor, dramaturgo y guionista audiovisual que compagina con su faceta de traductor y articulista. Su género predilecto es el thriller esotérico, pero cuenta también con una amplia publicación de novelas de género fantástico y de ciencia ficción de las que suman el medio centenar. También ha ganado diversos premios literarios entre los que destacan el premio de Ómnium Cultural de Granollers y el de Ciutat de Ibiza.

Detrás de cada escritor hay un motivo, un impulso, una necesidad. ¿Cuál fue el tuyo?

A los 21 años, con la vida solucionada a nivel laboral, decidí que quería ser artista. Fue entonces cuando me formé como locutor de radio, actor-director de teatro y músico. La música fue ganando terreno a todo lo demás y llegué a grabar un disco en 1995. Una vez se disolvió el último grupo musical que lideré, me di cuenta de que lo que más me gustaba de mis 3 facetas artísticas era escribir, es decir, los guiones de radio, las obras de teatro y las letras de las canciones. Así que estudié 4 carreras de letras a la vez —y otra después— para formarme debidamente como escritor profesional de todos los géneros en todos los formatos.

¿Cómo funciona tu proceso creativo? ¿Es más complejo encontrar una buena idea, la inspiración o escribirla? ¿Estructuras las novelas al detalle en cada capítulo, o prefieres dejar más margen a la imaginación e improvisación?

A partir de una excusa argumental —normalmente recurro a un listado kilométrico que tengo de argumentos clasificados por formatos literarios— estructuro lo básico para empezar el texto en cuestión: nombres de los personajes, escenarios y todo aquello de lo cual me tenga que documentar previamente. Pero cuando me pongo a escribir, es automático. Como domino el Word y tengo más de 500 pulsaciones por minuto con el teclado, escribo más rápido de lo normal. No creo en la inspiración, ya que me considero un simple transcriptor de historias que han sucedido, están sucediendo o sucederán, sea en esta vida-dimensión o en otras paralelas, las cuales tengo la suerte y el honor de poder presenciar en directo, sobre todo a nivel auditivo. Es decir, que solo escribo lo que escucho y veo, si no es imposible que pueda llevarlo a cabo.

¿Qué se esconde detrás de cada uno de tus relatos? ¿Piensas que una buena historia siempre ha de transmitir algo?

Todas las historias de ficción deben transmitir algo, por supuesto. Justamente es la esencia de la escritura: la comunicación de un hecho, un sentimiento, etc. Pero en la narrativa la solución es muy fácil: solo hay que resolver el conflicto a través del clímax.

¿Crees que tu forma de escribir ha evolucionado durante estos años? ¿El paso del tiempo ha influenciado tu forma de escribir?

Mi forma, en general, no. Lo que he ganado es en seguridad y en enriquecimiento del lenguaje, así como en las florituras del oficio. Pero en el caso de la novela, siempre que empiezo una me autoimpongo un reto, algo que aún no haya realizado, algo que me incomode mínimamente para estar más alerta de lo normal. Necesito este tipo de inputs para no deprimirme cuando estoy en modo creador.

Portada Las cicatrices de la Tormenta, Octavi FranchTu primera publicación en castellano, Las cicatrices de la tormenta (Ediciones Dédalo, 2017) es una reedición de la obra publicada en catalán. ¿Cómo fue el proceso de publicación? ¿Contactó contigo la editorial, fuiste tú quién dio el primer paso…? Por favor, ilústranos.

Con mi nombre no es la primera, es la segunda. La primera es la antología de cuentos de ciencia ficción Androides y tentáculos. En cuanto a la novela que comentas, no es una reedición, sino su publicación por primera vez en castellano. Bien, un colega escritor me recomendó esta editorial. Al ser de Barcelona, los visité y enseguida llegamos a un acuerdo. Les interesó especialmente «Las cicatrices de la tormenta» tanto por el género —thriller esotérico— como por el hecho de que, por casualidad, la tenía ya traducida al castellano. 

Con tu siguiente publicación cambias radicalmente de género y te lanzas al cuento infantil ilustrado Rondallas del baúl (Corona Borealis, 2018). ¿Por qué este cambio? ¿Cómo fue el proceso de escritura?

También hablamos, como en todos los casos, de la edición de un libro en castellano que ya había publicado anteriormente en catalán. Normalmente, solo escribo literatura infantil y juvenil por encargo, sobre todo para poder presentar algo a un premio. Son 7 cuentos bucólicos, en que humanizo a los animales, algo muy habitual en mi obra en general. La mayoría de los cuentos, además, cuentan con elementos biográficos, sobre todo en referencia a niños y niñas que conocí justamente con esa edad en el preciso momento de escribir dichos relatos. Lo que más me atrae de escribir una obra ilustrada es comprobar cómo se ha llevado a cabo la simbiosis entre escritor e ilustrador. Normalmente, tengo la suerte de poder escoger a los artistas plásticos que ilustran mi obra literaria susceptible de ello, así que disfruto muchísimo al poder admirar la obra final dual creada a 4 manos, unas tan importantes como las otras.

Una pregunta casi obligatoria: ¿hay diferencia entre escribir para adultos y para niños? ¿Son lectores más exigentes unos que otros?

La única diferencia es el target, es decir, a quién va dirigido. Lógicamente, hay temas que no puedes tratar en la literatura para niños ni para adolescentes. Pero considero que mi obra infantil y juvenil también tiene un matiz crossover, por lo que el lector adulto va a poder entender mensajes subliminales que el lector titular, para entenderlos, no va a poder comprender, al menos todavía.

Portada El cazador del arca, Octavi FranchDentro de El cazador del arca (Naveus, 2018) creas en una historia de aventuras clásica combinada con viajes temporales. Es difícil no recordar a El mundo perdido de Arthur Conan Doyle o Parque Jurásico de Michael Crichton. ¿De dónde surgió esta idea? ¿Estos autores han sido algunas de tus influencias para la novela?

Justamente fue así: leí Parque Jurásico y me dije 2 cosas: la película la dirigirá Steven Spielberg y quiero escribir algo parecido. Además, citas una de las novelas en la que se basó Michael Crichton para escribir Parque Jurásico 2: El mundo perdido, junto con King Kong, por supuesto. Pero la idea principal para escribir mi primera novela era que fuese una historia con capítulos independientes a modo de cuentos que se pudieran leer en cualquier orden, con un epílogo que cerrara la historia y que diera pie a la 2ª parte, ya que forma parte de una trilogía inédita. De hecho, el último capítulo es el primero que escribí. Están ordenados de esta manera como lo podrían estar de otra. Solo busqué un equilibrio entre el tipo de animales —criptozoología, mitología, zoología extrema— y las localizaciones, para que fuese lo más variado de cara al lector.   

En Hechizos de Hojalata (Naveus, 2019) entras de lleno en la ciencia ficción más clásica con una historia sobre androides. ¿Eres fan de Philip K. Dick? ¿Qué pretendías transmitir? ¿Te esperabas la repercusión que iba a causar?

Exacto: Philip K. Dick, junto con Ray Bradbury y Richard Bachman —en cuanto a narradores de ciencia ficción, aunque me influye casi más el cómic o el cine—, es mi autor de ciencia ficción favorito. Creo que la excusa de escribir esta novela fue la imagen de las 2 lunas, algo que parecer ser que ocurrió en el pasado o que ocurrirá en el futuro. A partir de ahí, también influenciado por El planeta de los simios, me imaginé cómo sería vivir en una Tierra que había perdido hasta su nombre.

De todas las novelas que has escrito, la que más repercusión ha tenido ha sido Tatuaje en el alma (Editorial Fleming, 2019), otra obra de tu género predilecto que narra la desaparición de una niña de 5 años. ¿En qué te basaste para escribirla? ¿A qué se va a enfrentar el lector? ¿Es apta para lectores impresionables?

Portada el último tiburón, Octavi FranchBueno, en catalán es la que ha ganado los premios más importantes, pero la novela que más repercusión ha tenido, a todos los niveles, es El último tiburón, que forma parte de mi saga Tetralogía del proceso. No es exactamente mi género favorito, porque es verdad que se trata de un thriller, pero no esotérico. Es mi 3ª novela escrita y mi primer thriller novelado. En este caso, la excusa fue la entrega de un paquete en una mensajería. A partir de ahí, diseñé todo lo demás. El lector se enfrenta a una historia de suspense en que sabrá, desde el capítulo 2, quién es el culpable. Pero la gracia está en que los personajes no lo saben y que solo hay 2 que sospechan de esta persona, y encima uno no es humano. Creo que hoy en día hay pocas cosas que puedan impresionar a un lector adulto, pero lógicamente si eres padre o madre de una criatura de 5 años, más o menos, no te va a resultar cómodo. Pero bueno, los thrillers están para ser sufridos, si no, no tendría sentido alguno escribirlos.

Has escrito diversos géneros literarios. ¿Con qué estilo literario te sientes más cómodo? ¿Existe diferencia a la hora de escribir según qué género?

Los he escrito todos, de hecho. Otra cosa es que estén todos publicados. Mi favorito sigue siendo el thriller esotérico, como he comentado antes. Supongo que es por 2 motivos: que practico la clarividencia literaria y que soy clarividente civil. La única diferencia entre escribir un género u otro es controlar que no se mezclen, aunque hoy en día todo es tan transversal y global que es muy difícil hablar de monogéneros.

Una de tus facetas es la traducción. ¿Cómo es el proceso de traducir la obra de otro autor? ¿Es algo tan difícil como parece? ¿Cómo haces para captar la esencia de un escritor? 

El autor que más he traducido soy yo mismo, por supuesto. Bien, siempre con el respeto máximo hacia el autor de dicho texto, intento ser literal siempre que pueda y solo modificar aquello imprescindible con el fin de mejorar la traducción lo máximo posible. Cosas de ser escritor, no lo puedo remediar.

¿Puedes adelantarnos algo en lo que estés trabajando? ¿Tienes algún proyecto nuevo en marcha?

Sigo publicando masivamente en castellano y reeditando en catalán, eso en cuanto a libros. Este año ya tendré, por fin, todas mis novelas acabadas en ambas lenguas en el mercado, al unísono. Lógicamente, tengo varias novelas empezadas de hace años y una infinidad para comenzar, pero todo esto aún está lejos de poder retomarse. Ahora estoy centrado en acabar de publicar el resto de mi obra en castellano, sobre todo las antologías de cuentos y los poemarios. Lo que tengo más verde es el tema cómic, pero pronto llegará el primero, estoy convencido de ello. Pero en lo que más centrado estoy, porque es lo que más me solicitan, es en la escritura de guiones audiovisuales por encargo, así como en la preproducción de mis propios guiones para cine y televisión y mis propias obras de teatro, las cuales se están representando en todo el mundo.

¿Podrías recomendarnos alguna novela que hayas leído últimamente que te haya enganchado, fascinado o que pienses que deberíamos leer dentro de los tres géneros de la web; terror, fantasía y ciencia ficción, con especial hincapié en autores nacionales?

Pues en catalán, L’arç blanc de Eusebi Anton i Asensio. Y en castellano, Después del fin de Juan Carlos Fernández.

No nos queda más que despedirnos y agradecerte desde NGC 3660 el tomarte el tiempo suficiente para contestarnos. Las últimas palabras son tuyas.

Muchísimas gracias a vosotros por esta oportunidad y quedo a vuestra disposición para lo que necesitéis siempre que lo requiráis.